Cuando mi hija de 10 años cada tarde pide conectarse al ordenador para chatear con sus amigas y amigos me sorprendo a mi mismo preguntadóme si yo hacia lo mismo. Evidentemente lo mismo exactamente no por una cuestión tecnológica pero sí parecido por que también nos llamábamos por teléfono o salíamos a la calle con los amigos a los que acabábamos de ver hacía un momento. Eso es lo que generalmente hacen, tienen contactos de los compañeros/as de su clase, de las amigas del verano, de vecinas y de familares con los que intercambian unas charlas difíciles de seguir entre tanto fondo de High School Musical, emoticonos y palabras escritas a medias con una mezcla del lenguaje SMS y de faltas de ortografia propias de la edad.
No creo que debamos tener miedo sobre esos contactos a través del messenger o del uso que se hace de la potente herramienta, pero sí precaución, no debemos despistarnos y pensar que está todo controlado.
Una de las primeras estrategias que deben seguir los padres que pretendan tener cierto control sobre lo que sus hijos hacen con el messenger es entenderlo bien, saber para qué sirve, como se utiliza, si hace falta abrirse una cuenta y chatear.
Otros consejos para padres que no se conforman con ver a sus hijos aparcados delante del ordenador y quieren tener algo que decir al respecto:
1.- Siempre que sea posible el ordenador para la conexion a internet y por tanto al messenger debe estar en una zona común. Evitar el ordenador en dormitorios cerrados.
2.- Llegar a acuerdos sobre horarios de uso del ordenador. Siempre después de sus tareas y con un claro límite máximo. Aprovechar la petición de conexión para negociar la realización de esas tareas que normalmente cuesta que hagan.
3.- Educar en el uso del messenger (y de internet). Explicar los peligros de añadir contactos que no conoces o de dar datos personales o fotografías. Intentar conocer a los contactos del messenger y mostrar interés por ellos de la misma forma que se muestra interés por los amigos del cole de tu hijo.
4.- Conversar con los hijos sobre la realidad de internet, ventajas e inconvenientes. Y estar ahí ante cualquier duda que les pueda surgir. Intentar compartir momentos de navegación y uso del ordenador.
5.- Utilizar herramientas de control parental puede tener cierto sentido cuando los hijos son pequeños pero es preferible hablar abiertamente y educar en el uso de internet y el messenger ya que en épocas de adolescencia ya es más difícil que esas herramientas sean útiles.
6.- Controlar el uso de cámaras web para que se utilicen solo con determinados contactos y no de forma indiscriminada. Por defecto la cámara desconectada.
7.- Cambiar la contraseña a menudo.
Hay una cosa clara, tu hijo no es un bicho raro por querer estar enganchado al ordenador y a la mensajería instantánea, el 90% de los niños y adolescentes de 12 a 17 años utilizan internet para comunicarse con sus amigos (datos del 2007). Pero eso no quiere decir que lo hagan sin ningún tipo de supervisión, y ahí es donde entramos nosotros.
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