La experiencia de la fotografía con el móvil ha mejorado con el tiempo. Los nuevos smartphones vienen provistos de fantásticas cámaras con muchos megapixeles y con sensores cada vez mejores. Pero... si vamos a utilizar esa cámara debemos seguir teniendo en cuanta una serie de hechos:
1.- Fotografiar con luz. A pesar de la mejora de los sensores, estos siguen siendo más pequeños y menos potentes que los de las cámaras tradicionales así que siguen necesitando más luz para llevar a cabo las fotografías. Si no tenemos esto en cuenta nos saldrán fotos movidas o con punto gordo.
2.- El zoom digital no es lo que parece. Lo único que hace es ampliar recortando el resto de la foto.
3.- Falta de velocidad. En muchos móviles arrancar la cámara de fotos es lentísimo con lo que es fácil perderse el momento justo de algo debido al proceso sacar móvil, desbloquear, buscar aplicación de cámara, ejecutarla y disparar.
4.- Tamaño de las fotos. Con una cámara de 8mpx cada foto puede ocupar unos 4Mb. Hay que disponer de almacenamiento adecuado si se quiere utilizar asiduamente.
5.- Lo que se ve en la pantalla y lo que sale en la foto es algo diferente, sobre todo en tonalidades y colores.
6.- Es más fácil que se ensucie el objetivo de la cámara de un móvil que el de una tradicional. Límpialo más a menudo.
